¿Por qué implementar estrategias de gobierno corporativo en startups?
Por Germán Stalker
Las startups son empresas basadas en la tecnología. Emprendimientos generados por emprendedores, científicos, inversores y gestores tecnológicos que se vinculan en los ecosistemas innovadores. Son dispositivos pensados y creados para la comercialización de desarrollos tecnológicos.
Si además de innovación, las startups incorporan estrategias de integridad y de gobierno corporativo en el core de su negocio es posible no sólo mejorar su acceso al mercado sino también su reputación. ¿Porqué?
Desde una perspectiva micro, porque la ética corporativa y la integridad impactan en la confianza de las personas. Implementar estrategias de ética y compliance desde su génesis no sólo previene conductas deshonestas. También, mejora la reputación de las startup. Una característica de las startups es que no tienen historia. Sólo presente. Y un futuro prometedor. Al no tener antecedentes comerciales en muchos casos les cuesta acceder al mercado financiero para escalar la tecnología. Contar con una estrategia de integridad facilita la llegada a esos mercados.
Los emprendedores y científicos saben que en un mercado global en constante cambio, en una economía en la que se procura maximizar el retorno que percibirán los accionistas, la innovación es el punto de partida de la competitividad. Pero no es suficiente. A largo plazo, influye la integridad en la manera de hacer negocios, los valores éticos y la confianza entre los actores de la cadena de valor.
Para los inversores, además del desarrollo tecnológico innovador la calidad en el proceso de gestación de la startup permite construir confianza. El cómo -estrategias de integridad y cumplimiento- y el quienes -la calidad humana además de la técnica del equipo de trabajo- le otorga un sentido de trascendencia a la startup. Un enfoque integral que le da sustentabilidad, en lugar de una perspectiva cortoplacista que apunte sólo a aumentar las ganancias cualquiera sea el medio. Es más probable que aquellos inversores tecnológicos y fondos de inversión que analizan la gobernanza de las startups, el cumplimiento de normas éticas y la manera en que realizan sus negocios, asignen recursos de largo plazo. Que inviertan en empresas en las que el componente ético y de transparencia son centrales en el manejo de la empresa. En suma, el accionar ético de las personas hacen que las startups sean más atractivas para la inversión.
¿De qué hablamos cuando decimos integridad para startups?
De implementar estrategias efectivas en base a las mejores prácticas y tendencias de gobierno corporativo. De reducir las brechas potenciales para la toma de decisiones informada mediante acciones concretas para cada startup. Con independencia de que se sancionen normas jurídicas con penas más fuertes [1], y que se tomen medidas para asegurar el efectivo cumplimiento, la incorporación de prácticas de integridad opera en la fase de prevención. En las conductas. En los hábitos de los actores dentro del entorno innovador. Implementar un plan de integridad con un código de ética, evaluación de riesgos, programa de entrenamiento y evaluación, son parte de una estrategia efectiva.
Además, la integridad y el gobierno corporativo no sólo generan confianza para las startup. También, impactan en la transformación que las tecnologías tienen en la manera de hacer negocios. Muchas de las empresas surgidas en la economía digital, utilizan el big data, la inteligencia artificial, machine learning, algoritmos y la integración de las tecnologías para sus innovaciones. Estas tecnologías se enfrentan a desafíos concretos relacionados con la ética, el cumplimiento y el comportamiento de las personas. La ciberseguridad, los datos personales, la protección al consumidor, las relaciones de trabajo, el derecho al olvido y la intimidad de las personas requieren conductas éticas y estrategias de protección de derechos fundamentales. Si la startups implementan desde el inicio estrategias efectivas de integridad en base a las mejores prácticas y tendencias, hacen más transparente el manejo de la tecnología.
Desde una perspectiva macro, el comportamiento innovador orientado a reglas éticas genera confianza en la cadena de valor de la startup. Si implementan programas de integridad que prevengan, por ejemplo, los potenciales conflictos de intereses articulan entornos de negocios transparentes y competitivos. Las startups que incorporan programas de integridad en el centro de la estrategia de sus negocios generan confianza dentro del ecosistema innovador. Un actuar transparente distribuye confianza en la cadena de valor en forma horizontal.
La suma de estos programas de compliance en lo micro, tiene el potencial de expandirse en el entorno aumentando la transparencia y confianza del sistema. Reglas de juego transparentes y políticas de apertura de datos fomentan la inversión agregada, la equidad y la competencia. En el largo plazo, el crecimiento económico sustentable.
Los empresarios, innovadores, científicos y emprendedores son una nueva generación de empresarios. Las startups nacen con una visión diferente del mercado y de la manera de hacer negocios. Desarrollan productos para mercados cada vez más exigentes y con consumidores sofisticados. El cómo tiene el mismo valor que el desarrollo de la tecnología. Contar con una estrategia de compliance desde el diseño de convierte a la startup en un emprendimiento que genera confianza.
Bibliografía
- CHESBROUGH, Henry (2006). “Open Innovation the New Imperative for creating and profiting from technology”. Harvard Business Press.
- LIN, T. C. W. (2016). “Compliance, Technology, and Modern Finance”. Brooklyn Journal of Corporate, Financial & Commercial Law, 11(2016), 159-182.
- OCDE (2016), “Lineamientos están en línea con los Principios de Gobierno Corporativo”.
- OPPENHEIMER, Andrés, (2014). “Crear o Morir. La esperanza de Latinoamérica y las cinco claves de la innovación”. Debate.
- WETTSTEIN, Florian, et. al. (2018) “International business and humans rights: a research agenda”, Journal of World Business.
- XU, G., & Yano, G. (2016). “How does anti-corruption affect corporate innovation? evidence from recent anti-corruption efforts in China”. Journal of Comparative.
[1] La Ley N° 27.401 de Responsabilidad Penal Empresaria. Establece que las personas jurídicas son responsables por los delitos de corrupción y exige que implementen Programas de Integridad que incluyan mecanismos internos de promoción de la ética y la integridad.